La nuestra es la historia de un sueño que se inició hace casi 80 años en el barrio de Boedo. Allí, en 1938, José María Tosone instaló su primer taller de zapatos con la firme convicción de garantizar un producto cuidado en cada detalle con una impronta artesanal única. El taller se trasladó en 1973 a la planta que ocupa hoy nuestra fábrica, el lugar donde generación tras generación logramos convertir la marca en un símbolo indiscutible de calidad y diseño.
En Hecho a Mano por Tosone cada zapato es una obra maestra de la artesanía, resultado del esfuerzo y la dedicación que implican más de 48 horas de trabajo y 150 procesos diferentes. Logramos así un producto que se destaca por su creatividad y la innovación en el diseño, y que encarna la tradición de una marca familiar. Hoy somos la tercera generación en esta historia, y asumimos cada temporada el desafío de transmitir una identidad que combina lo nuevo y lo artesanal en un producto de la más alta calidad. Las más destacadas marcas nacionales e internacionales confían en nuestro trabajo e incluyen nuestros productos en sus colecciones.